En algún momento habrá pasado por la cabeza de un buen número de personas en comprar una franquicia de algún servicio que sea sinónimo de potencializar lo invertido y eso suena fácil de hacer si se piensa en esas franquicias de renombre incluso mundial, pero está lejos de ser fácil.
Dicho sistema de negocios representa simplicidad en la constitución de un negocio ya que con sus reglas brinda cierta certidumbre en comparación con el emprendimiento independiente.
Pero para que lo difícil se convierta en algo simple (más no fácil), hay que entender su esencia en función y definición.
Cuando se va a adquirir la franquicia deseada, se debe comprender que el franquiciante cede al franquiciatario el derecho a elaborar, manejar o explotar un producto o servicio ya acreditado, incluyendo los conocimientos básicos para llevar con bien el negocio.
Por eso, estos son los cuatro elementos clave a considerar cuando se negocie para adquirir una franquicia:
1. El Franquiciante: persona jurídica que cede por un pago monetario su marca comercial, sus formas de trabajo, la experiencia ganada y los conocimientos aplicados y aprendidos.
2. El Franquiciatario: persona física o jurídica que comenzará a realizar negocios con una marca franquiciada la cual adquirirá, haciéndose acreedor de un fondo de comercio del franquiciante en un lugar exclusivo, teniendo asistencia total en el tiempo que dure la sociedad.
3. El contrato: con dicho documento se formalizará la relación entre ambas partes considerando la autorización del franquiciante al franquiciatario para ser representado bajo su razón social y comercializar sus productos o servicios mediante un sistema laboral concreto y experimentado a cambio de una remuneración previamente definida. Pero también obliga al franquiciatario a seguir las reglas, sistemas y procedimientos que el franquiciante demande.
4. Know How: son los manuales y documentos que el franquiciante da al franquiciatario cuando la sociedad se concreta. Contienen los conocimientos y experiencias técnicas, financieras, comerciales y administrativas que el negocio requerirá para su correcto funcionamiento.
La transición para ser un franquiciatario lleva a la persona a aprender de un mundo que puede ser sencillo de comprender, y en MVP Business Strategy te podemos brindar la ayuda necesaria para lograrlo. Acércate y conoce más de nosotros.
Fuente:https://www.entrepreneur.com/article/263721
Por eso, estos son los cuatro elementos clave a considerar cuando se negocie para adquirir una franquicia:
1. El Franquiciante: persona jurídica que cede por un pago monetario su marca comercial, sus formas de trabajo, la experiencia ganada y los conocimientos aplicados y aprendidos.
2. El Franquiciatario: persona física o jurídica que comenzará a realizar negocios con una marca franquiciada la cual adquirirá, haciéndose acreedor de un fondo de comercio del franquiciante en un lugar exclusivo, teniendo asistencia total en el tiempo que dure la sociedad.
3. El contrato: con dicho documento se formalizará la relación entre ambas partes considerando la autorización del franquiciante al franquiciatario para ser representado bajo su razón social y comercializar sus productos o servicios mediante un sistema laboral concreto y experimentado a cambio de una remuneración previamente definida. Pero también obliga al franquiciatario a seguir las reglas, sistemas y procedimientos que el franquiciante demande.
4. Know How: son los manuales y documentos que el franquiciante da al franquiciatario cuando la sociedad se concreta. Contienen los conocimientos y experiencias técnicas, financieras, comerciales y administrativas que el negocio requerirá para su correcto funcionamiento.
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